Degustación

Degustación del vino

Características que debemos apreciar de un vino

Disfruta del color y de sus propiedades.
Observa el color, la espesura y de la lagrima que deja en la copa.

Las características del color del vino son por los polifenoles que contiene la uva, entre estos están los antocianos que se encuentran en la piel y la pulpa, dando ese color tinto al vino. Por otro lado también están los taninos que se encuentran también en la piel, el las pepitas y el raspón (el esqueleto del racimo) y le dan el matiz astringente a algunos vinos.
 
Los vinos jóvenes tienen compuestos químicos muy cambiantes, que se combinan con otros taninos y dan paso a polímeros más estables que les proporcionan el color definitivo del vino. 

Durante la maceración, los antocianos pasan de tonos azules a colores rojizos o anaranjados.

Los vinos tintos jóvenes tienen usualmente un color púrpura, violeta o malva, que pasa a ser más rojizo o teja, y los bordes tienden a tonos caobas. Los reservas y los grandes reservas suelen tener tonos más apagados y traslúcidos que los más jóvenes.

En el caso de los vinos blancos suelen tener tonos pálidos, limón o pajizos en los primeros años, con toques verdosos y bordes blanquecinos, que evolucionan a tonalidades doradas, incluso ámbar. Esto es porque se fermentan sin piel.

Los vinos rosados evolucionan desde el rosa y hasta tonalidades anaranjadas claras e incluso amarillentos.

Aparte del proceso químico, del envejecimiento y el tipo de uva, están también las condiciones climatológicas (lluvia y horas de sol a las que ha sido expuesta) y los métodos de elaboración o su conservación.
Dependiendo del tipo de vino podremos encontrarlos de un rojo intenso a azul violeta en los tintos, en los blancos ligeramente amarillos y a veces un amarillo intenso, los rosados pueden tener diferentes tonalidades. Todas estas características se las dan el tipo de uvas con las que se produce.

Con el envejecimiento los tintos pierden el color llegando a naranja o amarillo en los blancos sucede al revés quedando con un color castaño o amarillento.

Las lagrimas en el vino son las gotas que escurren de la copa después de agitarla.

Dependiendo del tipo de gota podremos saber las características organolépticas antes de degustarlo, y nos indicarán su nivel de untuosidad o sea la suavidad que genera en el paladar, así como el grado de alcohol que lo compone.

Si la lagrima es densa y se desliza lentamente en la copa nos dice que es un vino con cuerpo, untuoso y con bastante alcohol. Por el contrario una lágrima ligera baja rápidamente nos habla de un vino con poco cuerpo y bajo contenido de alcohol.

Procura que la copa no tenga restos de detergente y la temperatura de la copa y el vino sean iguales, para que nos de una valoración real.
Aromas del vino se define al olor y características de la uva.

El aroma completo de todo el vino se llama Bouquet y Nariz es lo que utilizan los especialistas para hablar de ambos términos.

Olor el corcho no nos habla de las características del vino, pero puede revelar si el vino está o no oxidado. Si encontramos rayas, perforaciones, humedad, corcho seco o corcho deteriorado, nos ayudan identificar si el vino está dañado o no.

Hacer girar la copa nos ayuda a oxigenar el vino y a liberar su aromas.

Los primarios son los que provienen de la uva, se desprenden de la superficie del vino y aumentan cuando lo agitamos, y el aroma proviene por la variedad de vid y el terreno.

Los aromas primarios en las vid Blancas son:
Chardonnay: avellana, mantequilla, fresa, melocotón.
Parellada: flor de viña, manzanilla.
Sauvignon Blanc: grosella, menta, frutos tropicales.
Macabeo: Pomelo, manzana
Moscatel: rosa, nardo, jazmín, moscatel.
Riesling: limón, miel, albaricoque, acacia, romero.
 
Aromas primarios de las viñas tintas:
Cabernet Sauvignon: arándanos, moras, frambuesa, grosellas, pimienta verde, eucalipto, tabaco.
Pinot Noir: cerezas, violetas, fresas, cassis, grosellas.
Garnacha: confituras, especias (pimienta verde).
Syrah: moras silvestres, cassis, pimienta, laurel.
Tempranillo: bayas rojas (frambuesas, grosellas), ciruelas negras.
Merlot: Cassis, confitura de bayas rojas, pimienta verde.

Resumen:
Visón, Olfato, degustación.

La visión revela propiedades como el color y la matriz o sea la edad del vino.
La trasparencia revela el nivel alcohol y azúcar.
Los bordes muestran su estado de evolución.

El Olfato revela si está en buenas condiciones.

El gusto revela la textura; suave, espera o dulce.

Respirar el vino más que olerlo. Si la primera vez no percibes su olor, respira una copa de agua y después intenta nuevamente el vino y podrás ver la diferencia.


Degustación

El vino limpia las papilas gustativas, por lo que cuando se acompaña con los alimentos nos producen un sabor como si fuera la primera vez que los probáramos.

Nuestra lengua e indirectamente el paladar nos darán el sabor del vino.

En nuestra lengua percibimoslo saladoen los bordes internos. 

En la parte lateral, en el paladar y las encías, se percibelo ácido. Un vino excesivamente acido se mezcla con la saliva y produce astringencia, y aumenta la salivación. La acides de la uva proviene de los ácidos;málico, tartárico y cítrico, y los resultantes de la fermentación alcohólica son los ácidos; láctico, succinico y ácetico.

Lo amargo se percibe en la parte posterior de la lengua en la base y hasta la garganta. Su sabor recuerda a la quinina de la tónica, al café, al aceite de oliva, a la lechuga, rúcula, cacao o la cerveza. Es de desarrollo lento, pero crece y se mantiene en la boca. Proviene de los compuestos fenólicos nitrogenados (taninos de los hollejos y la crianza en roble), esteres, etc. Una parte de los taninos, además de amargos son responsables de la astringencia (sensación de rugosidad o desecación en el paladar) de algunos tintos de guarda.




CLASIFICACIÓN DE VINOS POR TIPOS DE UVA
Aunque conocer las uvas de los distintos tipos de vinos tintos ayuda a orientarnos en el alimento ideal para acompañarlos, también es cierto que hay que tener en cuenta otro factor importante que no es otro que la maduración de un vino. Como es lógico, el tiempo de envejecimiento en barrica confiere a los vinos un carácter determinado que, también, repercute en sus cualidades de sabor y en sus aromas.

Motivo importante por el que, más allá de saber las características organolépticas de cada estilo de uva, conocer las diferencias entre un crianza, un reserva y un gran reserva nos permitirá acabar de acertar en un maridaje con vino tinto.

Tempranillo
Como ya hemos visto en anterioridad en otro post, la uva tempranillo es la estrella de los viñedos de La Rioja. Una uva noble enormemente rica en matices y aromas, que oscilan, según el tipo de suelo en el que crecen y el tiempo de maduración, desde los sutiles toques de cereza a otros más intensos como el tabaco, los frutos rojos o el café. Dada esta exuberancia de aromas, si contemplamos un vino con esta uva para un maridaje con vino tinto podemos plantearnos acompañarlo de una amplia variedad de platos: desde cualquier tipo de carne asada a pescados de río o pastas con salsas suaves, sin olvidar los tradicionales guisos, los embutidos o los quesos suaves.

Cavernet Sauvignon
Una de las uvas más populares en los tipos de vinos tintos de estilo bordelés. De sabor fuerte y perfume rotundo, algunos de los aromas que podemos encontrar en los caldos con protagonismo de esta uva son la grosella negra o, incluso, el chocolate. Dada la contundencia del sabor de estos vinos, para el maridaje necesitará platos a la altura de esta intensidad: carnes rojas, caza, platos con un toque amargo y quesos fuertes.

maridaje con vinos tintos

Garnacha
Dadas las características propias de este tipo de uva, su presencia en los distintos tipos de vinos tintos está acompañada de otras uvas con vistas a equilibrar su alta graduación alcohólica. Debido a esta personalidad, los vinos tintos con garnacha estarán perfectamente acompañados de platos de sabores rotundos como los quesos curados, cualquier tipo de carne, pescados de sabor intenso o, incluso, ensaladas en las que a los vegetales le acompañen carnes, quesos o, incluso, frutos secos.

Merlot
Otra de las uvas características de los tipos de vinos tintos de corte bordelés. Además de su alto contenido alcohólico, estos caldos destacan por sus sabores especiados y afrutados (entre los que se pueden reconocer frutos del bosque, pasas de uva e, incluso, toques de menta). Nuevamente y debido a esta contundencia, para maridar este tipo de vino tinto lo ideal es acompañarlos de quesos semicurados, caza, arroces o, incluso, guisos con carne o de legumbres.

el maridaje con vinos tintos 
EL QUESO, POR SU AMPLIA VARIEDAD DE SABORES E INTENSIDADES, SON UNO DE LOS COMPAÑEROS IDEALES PARA EL MARIDAJE CON VINOS TINTOS

Pinot Noir
Los perfumes afrutados de este tipo de uva (en los que se distinguen fresa, pomelo y frutos del bosque) se combinan con otros tonos florales y espaciados (como la vainilla). Una riqueza de matices que convierte a estos tipos de vinos de tintos en compañeros de sabores más delicados como pueden ser carnes blancas, pescados, hongos y setas, o quesos suaves.

Graciano
Una de las uvas que rezuma, en sí misma, el sabor de la Denominación de Origen Rioja. De maduración tardía, sus aromas son especialmente característicos por los tonos de ciruelas negras, regaliz o flores entre otros. Por esto mismo, las vinos con buena proporción de uva graciano maridarán a la maravilla con pescados poco grasos, carnes de cerdo ibérico, caza (especialmente, faisán y perdiz), verduras o pastas.

Distintos tipos de vinos tintos para diferentes maridajes. Una manera de sentir y experimentar con los sabores bocado a bocado y sorbo a sorbo como lo que son: una pareja perfecta, el maridaje con vinos tintos, para disfrutar todavía más de cada matiz que sienta nuestro paladar.
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